Usos poco conocidos del vodka

Vodka para quitar adhesivos

Uno de los buenos usos del vodka, poco habituales por cierto, es quitar restos de pegamento y adhesivo de diversas superficies. Las botellas y vidrios, por ejemplo, quedarán perfectamente limpios si empapas una esponja con vodka y aplicas directamente sobre la etiqueta, en seco. Deja un instante presionando, y luego retira la etiqueta con todo y su pegamento. Si quieres, repasa luego con un algodón embebido en vodka para dejar el vidrio o el cristal completamente impecable.

"Con vodka puedes quitar restos de pegamento y adhesivo de diversas superficies."

Vodka para limpiar superficies difíciles

Hay zonas del hogar difíciles de dejar impecables, como la ducha. Para lograrlo, recurrimos a poderosos limpiadores comerciales llenos de químicos. Pero podrás dejarlos impecables con una solución mucho más gentil: usando vodka. Simplemente rocía el piso, los muros, la cortina de la ducha y todos los elementos con esta bebida, sin enjuagar luego. Eliminará los malos aromas, los hongos y la suciedad adherida como el sarro.

Vodka para desodorizar ambientes

Un uso muy peculiar y bastante poco conocido del vodka es como eliminador de malos olores.

En una botella con pulverizador, mezcla una parte de agua con una parte de vodka. Remueve bien, y rocía en el ambiente, al aire. Este desodorante no tendrá aroma, pero sí absorberá los malos olores de cualquier habitación, incluyendo el del encierro, comidas, y muchos más.

Vodka para restaurar cromados

Las superficies cromadas son algo difíciles de mantener en perfectas condiciones, pero podrás lograrlo aprovechando el vodka.

Toma un paño seco, suave y limpio, y humedécelo con este licor, para luego pulir el objeto de cromo con él. Vuelve a humedecer el trapo o paño con la regularidad que lo necesites. Luego de pulir toda la pieza, repasa con un paño seco y suave para sacar brillo. Este truco también funciona de maravillas en la porcelana, cristal, vidrio y loza.