Cloradores salinos para piscinas
Te contamos los beneficios y características de la electrólisis salina, un sistema innovador para mantener el agua de la piscina limpia y sin químicos agresivos.
¿Qué son los cloradores salinos?
Una idea que parece innovadora, aunque data del siglo XIX, es la electrólisis salina de las albercas de uso doméstico, un mecanismo de mantenimiento del agua que seguramente querrás conocer y aprovechar.
Se trata de un sistema que busca reemplazar el uso de cloro y químicos para mantener el agua de las piscinas, incluso en fuentes y todo sitio de estancamiento hídrico.
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Cómo funcionan los cloradores salinos
Se describe como una técnica de agregado de sal, que se distribuye adecuadamente gracias a la bomba de higiene en recirculación. Luego, mediante un skimmer o manguera de succión, el agua es tomada y pasada por un filtro de titanio con electrodos, para luego ser reintegrada a la piscina ya limpia e higienizada.
Al pasar por este filtro, el cloruro de sodio (sal) se convierte en un desinfectante poderoso y natural, denominado hipoclorito sódico. Éste es capaz de destruir al instante algas, hongos y bacterias, sin agregados nocivos para la salud.
"La electrólisis salina reemplaza el uso de cloro y químicos para mantener el agua de las piscinas."
Luego de su acción, el agua es filtrada, los residuos separados del líquido, y el hipoclorito vuelve a su estado de cloruro, es decir, regresa a ser sal en el agua, en una mínima cantidad; sólo se requiere de 5 a 6 gramos por cada litro de agua en la piscina.
Ventajas de los cloradores salinos
No sólo se trata de un sistema natural y menos agresivo con nuestra piel, sino que este mecanismo de higiene ayuda a prevenir trastornos oculares y dermatológicos. Quienes presenten sensibilidad al cloro podrán utilizar la piscina de modo natural, mientras que también se previene el depósito y desarrollo de hongos en nuestras uñas y cutis.
Además, se elimina el uso de químicos que pudieran resultar en trastornos debido al mal uso, al abuso, o al estancamiento de estos productos en los diversos sitios de la alberca.
Las mangueras y tuberías del mecanismo de filtrado e higiene también se benefician de esta limpieza, evitando la corrosión y el depósito de químicos en sus componentes. Incluso se trata de un sistema más gentil con el medio ambiente, ya que la sal no se evapora junto con el agua, por lo que se elimina el factor de liberación de químicos al entrono. Ambos elementos se recirculan y recuperan, es decir, el sistema recicla sus componentes, en un ahorro económico y ambiental, pues no se requiere del recambio del agua.
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"No sólo es un sistema natural y menos agresivo con la piel, sino que también ayuda a prevenir trastornos oculares y dermatológicos."
Además de higienizar el agua de microorganismos, se ha comprobado que las piscinas con sistema de electrólisis salina ahuyentan a las avispas y abejas, haciendo del uso uno mucho más agradable, lejos de peligros asociados con estos voladores. También el agua es más saludable para las mascotas, que a veces beben de la alberca desconociendo el peligro para su salud: El agua es salada, lo que desalienta esta actividad, y de ser realizada no supone la ingesta de químicos en nuestros animales, ni tampoco en bañistas descuidados.