Cómo hacer Pintura Comestible

Aprende el paso a paso fácil para fabricar pintura comestible, y haz que la hora del café, la merienda y cualquier momento sea una maravilla para todos tus sentidos.

Ingredientes necesarios

Tan sólo necesitas dos ingredientes para hacer pintura comestible y decorar todo tipo de alimentos. Aunque la receta es dulce en sí, dependiendo de la comida que prepares podrás usarla también en platillos salados, o hasta para pintar los platos en los que los sirvas. Esta pintura es completamente segura para los niños (pues no posee tóxicos ni ingredientes peligrosos) y es fácil de lavar, aunque quizás quieras usar guantes de cocina para tocarla, evitando que tu piel quede teñida por un buen rato.

"Tan sólo necesitas dos ingredientes para hacer pintura comestible y decorar todo tipo de alimentos: leche condensada y colorante vegetal de uso gastronómico."

Para crear pintura comestible necesitas leche condensada y colorantes vegetales de uso gastronómico líquido, o en pasta si no consigues del otro. Puedes usar tantos colores como quieras, preparando la pintura en cantidades para optimizar el tiempo en la cocina. Sólo recuerda contar con contenedores plásticos o de vidrio en cantidad suficiente, uno para cada color que prepares, para que tus tonos se vean impecables.

Para mezclar la pintura comestible puedes usar varillas de madera, espátulas de goma o cucharas metálicas sin problemas. Aplícala usando pinceles comunes (como los que usan los niños en sus artesanías) o los elementos que te resulten más cómodos, como mondadientes, estecas, las yemas de tus dedos (con guantes) o lo que prefieras.

Decorando con pintura comestible

Vierte la leche condensada en los contenedores, en la cantidad suficiente para crear pintura en diferentes colores, trabajando en serie. Agrega el colorante vegetal de a pocas gotas y mezcla muy bien, para hacer los tonos precisos (si te pasas del color, sólo agrega más leche condensada).

Los potecitos vacíos de yogur son geniales, pues su capacidad es suficiente y son cómodos para sujetar en una mano y trabajar con la otra. También puedes hacer la pintura en distintos colores usando una bandeja para hielos, y así tus niños podrán compartirla en una tarde de juegos y bocadillos decorados por ellos mismos. Verás que tus hijos adorarán decorar sus galletas y los trozos grandes de malvaviscos con esta pintura comestible, deliciosa y original.