Cómo hacer Palitos de Miel

Elementos necesarios

Lo primero, claro, es la miel. Elige una natural y pura, y entíbiala para diluirla y darle una consistencia algo más liviana. Puedes rebajar con agua si prefieres, para que tus palitos de miel sean más fáciles de usar y disfrutar. También puedes usar miel comercial, o siropes de azúcar, de maíz, caramelo líquido o el endulzante fluido que prefieras, procurando elegir los más naturales y saludables.

Por otro lado, necesitarás un mechero o una fuente de fuego seguro, una pinza de picos largos (como una pinza rosario), y sorbetes o pajillas plásticas. Si usas incoloras, el producto se verá mejor (en especial si agregas otros ingredientes, como veremos más adelante).

"Para consumir los palitos de miel, sólo corta un extremo y succiona el dulce contenido, o vuélcalo en tu bebida o en tu helado."

Pasos para hacer palitos de miel

Hacer palitos de miel es una técnica tan simple, que hasta tus hijos podrán ayudarte con ella, al menos en el llenado de los sorbetes. Sólo debes encajar un extremo de la pajilla en el pico vertedor de la miel, caramelo o sirope (suelen venir en frascos especiales, como puedes ver en la foto adjunta a la nota), sin cubrir el otro extremo, y presionar para que el producto rellene la pajilla, dejando unos 2 a 3 centímetros libres en cada extremo.

Si usas miel comprada en pote, entíbiala, y crea un cono de papel manteca o papel de hornear para dejarla caer dentro de la pajilla (podrás “frenarla” en el otro extremo presionando con la pinza).

Aplica tu creatividad aquí: puedes combinar miel y sirope para crear capas de distintos tonos en tus palitos, y también dar algo de color con colorantes vegetales de uso gastronómico. Otra opción es verter un poco de miel líquida, algunos confites pequeños, luego más miel y así, para crear capas sabrosas y llamativas.

Para cerrar el extremo de los sorbetes, toma la pajilla con la pinza, en un extremo, dejando unos 5 milímetros libres, aproximadamente. Acerca el plástico al calor de la llama para que se derrita y se funda, cerrando la pajilla. Usa otra pinza para presionar bien, de ser necesario, asegurándote de hacer palitos de miel sin filtraciones. Repite en el otro extremo, y ya tienes listos tus deliciosos endulzantes portátiles.