Cómo hacer Nubes de Huevo

Su esponjosa apariencia es simplemente maravillosa, y también es un plato fácil a la vez que versátil, que te encantará para acompañar carnes, para poner encima del arroz, o para comer solos, agregándoles hierbas y especias a tu libre placer.

Su secreto está en una cocción de las claras que permite que queden espumosas, infladas como una nube, mientras que la yema se cocina sólo a su punto justo, quedando suave y algo líquida por dentro.

Un concepto simple

Las claras de huevo tienen un alto contenido de agua, ¡casi de un 90%!. Además, poseen proteínas que se ligan a las moléculas del líquido, y otras que las repelen: esta combinación permite lograr pequeñas burbujas al contacto con el aire (mediante el batido), dándole a las claras una textura esponjosa inigualable.

"Los huevos en nube son excelentes para acompañar platos de carnes, granos y también panificados, y hasta se pueden saborizar con hierbas de modo de aprovecharlos en un desayuno o una una comida completa."

Este método de cocción permite combinar los líquidos de la yema apenas cocina con la nube de claras, o cometer la sabrosa tentación de untar en ella los demás alimentos. Son excelentes para acompañar platos de carnes, granos y también panificados, y hasta se pueden saborizar con hierbas o especias, de modo de aprovecharlos en un desayuno nutritivo o en una comida completa y deliciosa.

Pasos para preparar nubes de huevo

Sigue este paso a paso para preparar huevos en nube perfectos:

1. Precalienta el horno a 190°C. Prepara una placa con papel de hornear, engrasado si prefieres.

2. Usando dos cuencos, separa las claras de las yemas de 4 o más huevos. Verifica que no tengan resto alguno de yema o de cáscaras, y que los huevos estén a temperatura de ambiente (no fríos del refrigerador).

3. Bate las claras hasta que tomen firmeza (punto nieve). Deja reposar unos minutos para integrar los líquidos que pudieran depositarse al fondo, volviendo a batir durante algunos pocos segundos más.

4. En este punto puedes saborizarlas agregándoles queso parmesano u otro, también hierbas y hasta semillas de tamaños reducidos. Recuerda integrar los extras usando una espátula y haciendo movimientos envolventes, para no “aplastar” las claras, quitándoles el aire que permite que se hagan esponjosas.

5. Usa una espátula para poner las porciones de claras batidas en el papel de hornear engrasado, formando la misma cantidad de “nubes” que de huevos usados, o más si quieres hacerlas más pequeñas (aunque respetar la cantidad de huevos te ayudará a que cada nube tenga su "solcito", es decir, su yema).

6. Usando el dorso de una cuchara o espátula, presiona muy suavemente al centro de cada nube, creando un hoyito en el que luego pondrás la yema con mucho cuidado.