Cómo hacer una bitácora de emociones
Tal como si fuera un diario íntimo, haremos una original bitácora de emociones que registre periódicamente nuestro estado de ánimo.
Ideas para hacer una bitácora de emociones.
Qué son las bitácoras
Las bitácoras, una especie de diario o jornal, son muy útiles para liberar emociones y sensaciones, en busca de la paz espiritual y del bienestar. Del mismo modo que un diario íntimo o un diario de viaje, las bitácoras nos permiten exteriorizar nuestras emociones y pensamientos, para poder liberarnos de su presión, y también nos permiten luego recapitular los hechos pasados, buscando observar nuestras mejoras y avances de manera sencilla, adquiriendo con ello auto aprendizaje y conocimiento.
Ideas para hacer una bitácora de emociones
- Podemos hacer una bitácora casi en cualquier diseño y material, de modo que quede a nuestro gusto. Este es un dato muy importante, pues la bitácora de emociones debe ser cautivante, y debe invitarnos a dejar registradas nuestras percepciones a diario, o con una regularidad determinada.
- Este modelo de bitácora de emociones es meramente gráfico, es decir: no lleva escritos, por lo que su tamaño puede ser más reducido que el de una bitácora escrita. Debido a su modalidad de uso o de registro, podemos configurarla a modo de afiche, y lucirlo en la pared para una fácil y rápida visualización.
- Para crear esta bitácora utilizaremos un diseño impreso (en casa o en imprenta, a tu gusto), o bien un afiche blanco de base y calcos de dos colores, uno para los días Domingo o Lunes, demarcando así el cambio de cada semana, y facilitando su lectura. También podemos usar el segundo color para demarcar el primer día de cada mes, dependiendo si haremos una bitácora anual, doce bitácoras mensuales, o incluso 52 bitácoras semanales, tantas como gustes.
- En cada uno de los sectores diarios anotaremos, con simpleza, una carita al final de la jornada. Para facilitarnos la tarea podemos crear un sistema de caras diseñadas, dividiéndolas entre, por ejemplo, cuatro estados de ánimo: feliz, triste, enojado o normal. También, claro, podremos hacer cuantos diseños nos parezcan importantes de dejar asentados. Esto dependerá de cuánta especificidad quieras darle a tu bitácora de emociones.
- Al final de cada día (o de cada jornada designada), dibujaremos en la bitácora, la cara que mejor represente nuestro estado anímico y nuestras percepciones emocionales de ese día. Antes de anotarla, daremos unos minutos de reflexión a ello, y extraeremos una suerte de promedio diario. Con el tiempo, podremos volver atrás para ir viendo nuestros cambios de ánimo, determinando los momentos de frustración, de enojo y, mejor aún, de felicidad gradual.
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