Dieta de la proteína
A pesar de que muchas dietas restringen las carnes, hay una que le otorga el papel protagónico: la dieta de la proteína o hiperprotéica.
Cómo hacer la dieta de la proteína
Hay muchas dietas diseñadas para ayudarte a deshacerte de esos kilos de más y recuperar la figura esbelta y firme. Una de ellas es la dieta de la proteína o hiperprotéica: una opción ideal para los amantes de la carne, que puedes practicar durante cortos períodos de tiempo y darle así a tu cuerpo un shock nutritivo muy especial.
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Beneficios de la carne
La carne ha sido demonizada en muchísimas dietas, mayormente debido a su consumo sin "limpiar". Pero la de res o cualquier otro tipo de carne es parte fundamental de nuestra alimentación, una fuente de proteínas y minerales completa que sólo requiere de quitar las grasas y nervios antes de cocinar, de preferencia a la plancha o a la parrilla, para alimentarnos saludablemente.
La carne aporta una gran saciedad, lo que te ayuda a comer menos y a evitar los bocadillos entre comidas. Si tan sólo te dedicas con esmero a su preparación, es un alimento saludable y especial para bajar de peso.
"La carne es una fuente de proteínas y minerales completa que sólo requiere de quitar las grasas y nervios antes de cocinar."
Alimentos para la dieta de la proteína
Puedes incluir fuentes de todo tipo: carnes de res, de cerdo, pollo, pavo, pescados, mariscos, lácteos, huevos y lentejas u otros vegetales con carga de proteínas. Al consumirlas en cantidad abundante, el organismo no debe recibir aportes de calorías (razón por la que debes desgrasar la carne en los métodos de cocción y durante la preparación), mientras que el cuerpo se ve forzado a trabajar activamente, quemando grasas desde el proceso digestivo.
Junto a los alimentos proteínicos debes consumir otras fuentes de vitaminas y minerales en abundancia, para favorecer la correcta nutrición celular. Ensaladas de hojas, frutas y vegetales diversos condimentados con sal, zumo de limón y apenas unas gotas de aceite (de ser indispensable, para restringir el aporte de hidratos de carbono) serán los aliados perfectos para tus carnes.
Más importante aún es el mantenerse hidratado. Un mínimo de dos litros de agua al día es el consumo básico recomendado en esta dieta, y la restricción total de zumos de frutas (naturales o artificiales), refrescos, sodas y bebidas con alcohol y azúcar agregado. Estas aportan calorías, que es lo que quieres evitar durante este gran aporte de proteínas.
Modelo de dieta hiperprotéica
Se debe respetar el consumo de agua a lo largo del día, y el cumplimiento de las cinco comidas diarias:
Desayuno: una ración de huevos (duros, cocidos, revueltos) y tocino cocido al aire o a la plancha (sin aceite), una taza de café negro o con leche desnatada.
Para la colación de media mañana, una ración de quesos cero calorías, una taza de leche con frutas frescas, un yogurt cero calorías y un café negro
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"Puedes incluir fuentes de todo tipo: carnes de res, de cerdo, pollo, pavo, pescados, mariscos, lácteos, huevos y lentejas u otros vegetales con carga de proteínas."
Almuerzo: Ensalada de hojas verdes, de zanahorias o de tomates (esta es la preferida) con una porción de carne magra y bien cocida, o una ración de jamón serrano, salmón o ensalada de lentejas sin condimentar
Merienda: Aperitivos o pinchos de jamón y queso de pasta blanda y con cero calorías, rolls de salmón o de jamón crudo o cocido con queso untable blanco, u otro bocadillo similar
Cena: Ensalada de tomates, de lentejas con huevos duros picados o con mariscos, arroz con mariscos, pescado, carnes magras bien cocidas a la plancha.