Consejos para decorar pintando con una esponja (esponjado)

Algunos consejos para aplicar la técnica del esponjado sobre una pared.

82% me gusta (11 votos) 02/03/09 por Yolanda

Consejos para la técnica del esponjado.

Pintar con esponjas

Para decorar con la esponja una pared se utiliza el sistema de dejar espacio entre las impresiones del primer color, sin embargo, no debe tomarse demasiado al pie de la letra, pues los colores pueden sobreponerse, sobre todo si se han secado.

Los colores al temple son opacos, de modo que no son afectados por el color que haya debajo de ellos, a no ser estén húmedos, en cuyo caso ambos se mezclan.

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Consejos para la técnica del esponjado

Lo más seguro es usar una esponja casi seca. Mientras se trabaja es conveniente revolver frecuentemente la pintura con una espátula de madera, o con una varilla, para evitar que el polvo colorante se deposite en el fondo del recipiente usado.
Suponiendo que se haya aplicado un anaranjado, o un rosa pálido, y que se piense usar un segundo color, que podría ser un verde claro, al aplicarse este, puede tenerse la impresión de que es demasiado oscuro. A pesar de esta impresión, sígase adelante con el trabajo, pues al secarse, el color se aclara, dejando una hermosa combinación de tonalidades.
Generalmente, la gente se figura que el decorador, al iniciar un trabajo de esta índole tiene planeado un diseño definido, que sigue desde el principio, pero en realidad es casi imposible atenerse a un plan. Lo único que hay que hacer es ir manchando la pared, y ya se formará el dibujo por su propia cuenta.
El punto principal es éste: oprimir la esponja ligeramente contra la pared, levantarla sin arrastrarla, y hacer una nueva impresión, y seguir siempre en esta forma. No hay que frotar la esponja contra la pared, pues se producen manchas. Lo que se necesita, son golpes ligeros, no la recorrida de un pincel. En cuanto se inicie el trabajo se comprobará lo sencillo que es.