Cómo Conocer la Ciudad en un Viaje de Negocios

En la mayoría de los casos, la actividad más ajetreada comienza a las 8 de la mañana y finaliza a las 6 de la tarde. Y eso si la agenda está completa. Igualmente, se pueden aprovechar los tiempos libres para recorrer la ciudad en un viaje de negocios o esperar a terminar todas las actividades para convertirse en un turista más.

Viaje de negocios: Cómo organizar la agenda para conocer la ciudad

Si tienes un encuentro laboral a las 10 de la mañana y otro a las 3 de la tarde, ¿qué haces en el tiempo entre ambas?. Pues, tienes diferentes alternativas. Una de ellas puede ser adelantar trabajo para lo que sigue, pero otra interesante también es disfrutar de la estancia y de las atracciones más cercanas del destino.

Es preciso ser bien organizado y tener en cuenta ciertos factores al momento de decidir a dónde ir para poder cumplir con las obligaciones, y al mismo tiempo pasarlo de maravillas en una ciudad desconocida o que vale la pena visitar.

"Las reuniones de trabajo suelen llevarse a cabo en oficinas que están en el centro, donde quizás se localicen muchos atractivos turísticos que puedes recorrer durante tu viaje de negocios."

Como primera medida, es preciso una planificación previa. No es lo mismo estar una semana en ese sitio y tener un congreso que lleve todo el día, que ir por dos días y tener una sola reunión. Entonces, primero que nada debes agendar tus eventos profesionales.

Una buena idea es llevar una agenda o planificador con horarios donde se puedan anotar las actividades. Es verdad que algunas de ellas se pueden extender o reducir, sin embargo, tú debes saber, aproximadamente, cuánto tiempo te lleva cumplir con cada una. Además, en los negocios “el tiempo es dinero” y si te han dicho que la reunión será de 10 a 11, no esperes que se extienda mucho más que ello, a menos que sea necesario pautar una nueva cita para cerrar un contrato o presentar cierta documentación.

Entonces, una vez que tengas delimitadas las actividades en cada franja horaria, es tiempo de analizar qué tiene ese destino para ofrecerte. Ese sería el segundo paso para recorrer la ciudad entre reuniones de negocios.

Tips para recorrer la ciudad en un viaje de negocios

En la gran mayoría de los casos, los encuentros laborales se llevan a cabo en una gran urbe y las oficinas están en el centro, donde quizás se localicen muchos atractivos turísticos. Eso es una gran noticia para ti si deseas visitar al menos lo más destacado. En Internet puedes conseguir pequeñas guías de turismo de la ciudad en específico, en base a los días que tengas disponibles o según el orden de prioridad, entre lo imprescindible y lo que puedes dejar pasar, al menos por esta vez.

Es bueno que conozcas los horarios en que están abiertas al público estas atracciones. Recuerda que no es lo mismo temporada alta que baja, y que hay algunos días de la semana que permanecen cerrados. Otra cuestión a tener en cuenta es que seguramente estés con los minutos contados, por lo cual no puedes “darte el lujo” de esperar en una fila para sacar un boleto o para ingresar en un museo.

Pero no te preocupes, porque eso también tiene solución. En los teatros, edificios históricos, museos y monumentos cuyo ingreso sea de pago, los boletos se pueden conseguir por Internet. En algunos casos, como por ejemplo la Torre Eiffel de París, hasta se puede especificar el horario de la visita (una franja horaria en que subirás). Esto es muy bueno para ti si deseas recorrer la ciudad en medio de las reuniones de negocios.

Una recomendación interesante es que anotes en la agenda, con un color diferente, qué actividades turísticas deseas realizar y el tiempo que te llevarán. No olvides adjuntar mapas, planos, boletos e ingresos.

Los medios de transporte y el tránsito pueden ser tus aliados o tus peores enemigos cuando estás contrarreloj. Si no conoces muy bien la ciudad y tienes miedo de perderte y llegar tarde a todos lados, consulta bien desde el momento en que arribas. El metro es el más recomendado porque no tiene problemas de atascos, pero también puede ser una pesadilla si no conoces bien las combinaciones.