Ideas para Invertir el Dinero Ahorrado

2. Seguros de vida: Los que no tengan deudas pueden invertir con un seguro de vida, de gastos médicos mayores, de la casa, del auto, etc. Así se reditúan los dividendos a largo plazo. Todos están pensados para ayudar a la persona a afrontar cierto gasto elevado que no todos tienen la posibilidad de enfrentar por si solos.

3. Invierte en bolsa o en oro: Para ahorros moderados, se puede optar por invertir en bolsa o en oro. Siempre es aconsejable tener un broker o un experto que nos asesore, con el fin de que nos explique a la perfección cuáles son los mejores movimientos, los mercados más redituables, etc. Y además, para que las ganancias sean superiores, ingresando en un grupo mayor de inversores y obteniendo más intereses.

4. Diversifica: Si tienes una cantidad considerable de dinero ahorrado habrá más alternativas para invertirlo, pero siempre hay que tener en cuenta la diversificación, es decir, no colocar todo en una misma transacción. Ahorrar una parte del ingreso mensual ayuda a aumentar ese "pozo" de dinero para tener acceso a mejores oportunidades de inversión.

"Los expertos dicen que una de las mejores maneras de invertir dinero es pagar deudas. Al cancelarlas se reducen los intereses, y a la larga, el sueldo que se percibe rinde más."

5 Inversión en bienes raíces: Si tienes un monto considerable, puedes invertir en bienes raíces, comprando un departamento o una casa. Contar con una propiedad puede ser un negocio o no. Si la usamos para vivir se convierte en un pasivo, no en un activo, porque genera gastos. Si la alquilamos, es un ingreso que percibimos todos los meses, y si la vendemos cuando los precios suben, habremos aumentando nuestra inversión.

Como esta es una de las inversiones que más detalles hay que tener en cuenta, a continuación te damos algunos consejos.

Estrategias para invertir en bienes raíces

1. Comprende que es una inversión a mediano o largo plazo: Si estás buscando un beneficio en pocos meses, este sector no es una idea viable. Ten en cuenta que se necesita un promedio de 8 meses para poder vender una propiedad a un precio que convenga. A esto se le debe sumar el tiempo que dedicas a encontrar el departamento o la casa, y el que necesites esperar para que su valor se aprecie. Según los expertos, todo esto suma cerca de dos años, como mínimo.

2. Utiliza bien tu dinero: Si buscas un crédito para comprar una casa, debes saber que algunos bancos o instituciones ofrecen financiamiento por el 70%, 80% con plazos largos. Pero también puedes considerar la posibilidad de adquirir primero una propiedad más pequeña para poder liquidarla rápidamente, y luego "sumar escalones" hacia una más grande.

3. Vivir de rentas, un sueño no tan lejano: Una vez que ingresas en la "burbuja inmobiliaria", podrás ir adquiriendo cada vez mejores propiedades y tener varias en tu haber. Esto puede llevarte tal vez 10 o 15 años, pero la buena noticia es que después, cuando te retires, podrás vivir mucho mejor, o no tener que esperar a la edad límite para dejar de trabajar.

4. Una mansión no es una buena inversión: Los patrimonios que cuestan más son difíciles de vender, sobre todo cuando hay crisis. Es preferible adquirir dos casas o departamentos pequeños que una grande. Si estos tardan dos años en venderse "bien", una mansión requiere unos cinco. Y además, si tu idea es alquilar las propiedades, también será más sencillo encontrar dos familias que quieran rentar dos o tres ambientes, que una grande que esté dispuesta a alquilar una casa con cinco habitaciones y tres baños.

5. Compra siempre lo seguro: Hay "oportunidades" que te pueden deslumbrar, pero no siempre debes confiar en ellas. Si es demasiado barato o si se dan muchas facilidades para pagar, analiza el caso con más detenimiento. Si bien cobran comisión y los precios pueden ser más elevados, una inmobiliaria es mucho más segura, sobre todo si no tienes demasiada experiencia.

6. No vendas antes de tiempo: Para recuperar tu inversión, como se decía anteriormente, debes esperar al menos 24 meses. Es el tiempo justo de un contrato de alquiler, por ejemplo, para que no dejes la propiedad "vacía" por dos años y además aproveches para ganar un dinero extra a cada mes. Si la vendes antes de tiempo, puedes no conseguir el monto deseado y no obtener las ganancias correspondientes.