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Cómo Limpiar SILLONES Y SOFÁS DE CUERO - Trucos Caseros

Cómo Limpiar un Sillón de Cuero

Los sillones, sillas y sofás de cuero se pueden limpiar fácilmente con muchos métodos caseros. Prueba los trucos de esta nota y olvídate de las manchas

84% me gusta (19 votos) 08/11/10 por Mariano

© Depositphotos.com/photographee.eu

Hazle un mantenimiento a los sillones de cuero desempolvando diariamente y dando un repaso semanal con cera

¿Con Qué Limpiar Sillones de Cuero?

Para limpiar los sillones, sillas y sofás de cuero primero debes quitar el polvo utilizando un paño suave que no deje vetas. Ante una mancha o un derrame de bebidas, limpia inmediatamente haciendo presión (sin frotar) con un paño absorbente, seco y limpio.

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Si notas que han quedado manchas, aplica un paño levemente humedecido en agua jabonosa, secando de inmediato con papel absorbente suave. En algunos casos puedes utilizar productos de limpieza en aerosol, aplicándolos sobre el paño y no sobre el sillón, para evitar manchas por contacto excesivo.

Si quieres usar un método casero para limpiar el cuero, luego de quitar el polvo repasa con un paño suave embebido en cerveza. Humedece suavemente, sin cargar tanto para no dejar manchas. Deja actuar por varios minutos.

Mientras tanto, toma una clara de huevo y bate a punto nieve. Úsala para frotar bien por toda la piel. Podrás sacarle brillo repasando con un paño suave, preferentemente de lana.

Cómo quitar manchas en sillones y sofás de cuero

Existen muchos trucos para quitar las manchas en muebles de cuero. Uno de ellos indica que debes frotar la zona con cera en pasta para lustrar zapatos, del color de la superficie. Prueba antes en una zona poco visible para asegurarte que el tono de la cera es la adecuada. Aplica, frota suavemente, y retira el excedente con un paño seco y suave, mejor si es de fibras naturales.

"Recuerda utilizar los productos de limpieza aplicándolos sobre el paño y no sobre el mueble, para evitar manchas por contacto excesivo."

Los muebles de cuero se destacan por su elegancia, pero apenas sufren alguna mancha es mejor actuar de inmediato.

Otro método para quitar las manchas es usar crema limpiadora para el rostro. Pon un poco en un paño limpio y frota la zona siguiendo la veta del cuero. Finalmente, lustra y quita restos usando un paño limpio. Además de obtener un excelente resultado, lo nutrirás.

Quitar manchas de líquidos en el cuero (vino, gaseosa, café)

Cuando se produzcan manchas con líquidos como el vino, el café o refrescos, procede rápidamente a absorber con una servilleta de papel todo lo que puedas, luego espera que se seque el resto y aplica la crema limpiadora.

Para prevenir que penetren la superficie es aconsejable emplear algún tratamiento anti manchas con algún producto comercial, o aplicarle regularmente una fina capa de cera incolora para impermeabilizar.

Cómo limpiar barro en sillones de cuero

Si el mueble de cuero tiene manchas de barro, lo mejor es dejar que se seque y después cepillar enérgicamente hasta que desaparezca. Con una aspiradora, recoge los residuos que hayan quedado tras el cepillado. Si aún quedan marcas, utiliza un trapo humedecido con agua jabonosa y seca bien.

Mantenimiento de los muebles de cuero

La humectación es fundamental para los muebles de cuero. Al menos una vez al año hay que aplicar un producto que lo hidrate, para evitar que la piel se abra o se reseque. Además, esto impide que absorba profundamente todo tipo de sustancias, previniendo suciedades y manchas.

También es importante mantenerlos desempolvando diariamente y dando un repaso semanal con cera o limpiador.

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Dos a tres veces por año, haz una limpieza en mayor profundidad utilizando ceras y pastas específicas.

Si prefieres emplear un método casero, frota con un paño embebido en una mezcla hecha con partes iguales de aceite de linaza y vinagre (de preferencia de manzana o de alcohol). Con esto darás un mantenimiento ideal, aunque no debes hacerlo demasiado seguido. Una vez cada 4 meses estará bien.

3 Remedios Caseros para dar brillo a los sillones de cuero

1. Leche descremada: Si el sillón de cuero no está sucio pero ha perdido su brillo natural, simplemente toma un trapo suave humedecido en leche descremada. Pasa por toda la superficie y deja actuar.

Luego, frota con un paño de lana y obtendrás un brillo especial, como si el cuero fuese nuevo. También se puede reemplazar la leche por esencia de trementina.

2. Jalea de petróleo: Otra solución consiste en desempolvar y luego frotar la superficie con jalea de petróleo caliente o aceite de ricino.

3. Esencia de trementina y cera de abejas: Mezcla una parte de esencia de trementina con media parte de cera de abejas, y repasa toda la zona.

Si buscas productos comerciales, usa aerosoles para lustrar cuero, o si es un caso de emergencia utiliza los que están formulados para muebles de madera. Recuerda aplicar el producto al paño y nunca directamente sobre el sillón. Luego de frotar, repasa con un trapo de algodón suave.

La elegancia del cuero y sus secretos

Los muebles y tapizados de cuero se destacan por su elegancia. Se trata de un material de muy alta resistencia, tanto a los golpes como a los roces. Sin embargo, cuando sufre daños hay que darles reparación de inmediato, para evitar que el problema se expanda y se torne irreparable.

"La humectación es fundamental para los muebles de cuero. Al menos una vez al año hay que aplicar un producto que lo hidrate, para evitar que la piel se abra o se reseque."

El cuero es resistente a quemaduras, por lo que la aparición de manchas puede deberse a humedad o a suciedades, y también debes darle tratamiento veloz para evitar que se fije y dañe irreparablemente el mueble.

Nunca utilices detergentes, jabón para la vajilla, jabones comunes o productos químicos agresivos para limpiar muebles de cuero, ya que podrían alterar su estado.

Cómo Limpiar el Cuero

Cómo Limpiar Superficies de Cuero

Para limpiar el cuero debes actuar de inmediato. Utiliza un paño limpio para retirar el polvo. Luego, pásale un trapo humedecido con una mezcla de jabón neutro y agua destilada. Restriega un poco hasta que salga apenas espuma, y limpia con un trapo húmedo. Finalmente, seca con una toalla limpia.

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