Cómo Prevenir las Enfermedades de Invierno

La llegada de la estación fría trae consigo una nefasta compañía: las enfermedades de invierno. Aprende a reconocerlas a partir de sus síntomas, para saber cuándo puedes aliviarlos en casa y cuándo es necesario acudir al médico.

Consejos para evitar las enfermedades de invierno. síntomas y prevención de las enfermedades comunes de invierno

El resfrío es una típica enfermedad de invierno. Se alivia con analgésicos, infusiones calientes, reposo e hidratación

Enfermedades de Invierno: Síntomas y Prevención

Las enfermedades de invierno pueden afectar la salud de cualquier persona, sea hombre o mujer, niño, adulto o anciano, embarazadas, fumadores, inmunosuprimidos y más. Para prevenirlas, no hay nada como el cuidado: se debe lavar las manos varias veces por día, evitar el contacto directo o indirecto con personas afectadas, cuidar las vías respiratorias y ventilar a diario los ambientes, en especial si hay fumadores, estufas a leños o a gas. Tu médico también podrá recomendarte prevenciones auxiliares, como vacunas antigripales, refuerzos vitamínicos u otros complementos; haz la consulta antes del inicio del invierno para estar fuerte y saludable.

"Las enfermedades de invierno pueden afectar la salud de cualquier persona. Para prevenirlas, no hay nada como el cuidado."

Enfermedades comunes de invierno

Gripe: Es una infección viral de muy fácil contagio, que llega a provocar fuertes epidemias cada año. Posee muchas cepas o tipos, algunas incluso mortales. Los síntomas que la identifican son fiebres altas (mayores a 38°C), dolor muscular general, tos seca, dolor o molestia articular, secreciones nasales ligeras, y a menudo dolores de cabeza y de espalda. Se puede prevenir la gripe con higiene, abrigo e inoculaciones antigripales anuales.

Resfrío común: Es mucho más habitual y menor peligroso. Sus síntomas son muy parecidos a los de la gripe, aunque hay más secreciones nasales (habitualmente de color verdoso o amarillo) y su duración es más corta. El resfrío no posee cura, pero sí alivio a los síntomas con analgésicos, infusiones calientes, reposo e hidratación.

Tos convulsa: Es una enfermedad típica de invierno producida por la bacteria Bordetella pertussis, y muy contagiosa. Su mejor prevención es la vacuna triple bacteriana acelular (en especial en embarazadas y bebés), y sus síntomas incluyen congestión nasal, secreciones nasales abundantes, tos, estornudos frecuentes y fiebre leve. El aumento de la intensidad de la tos puede producir dificultad para respirar.

Neumonía (por neumococo): Es la enfermedad provocada por una bacteria, llamada Streptococcus pneumoniae. Suele desprenderse de las gripes, y también puede mutar y derivar en otras enfermedades neumocócicas como meningitis, sepsis, otitis y sinusitis. Sus síntomas son fiebre leve o alta, tos, mucosidad amarillenta o verdosa, escalofríos, temblores y dificultad para respirar.

"Haz una consulta a tu médico antes del inicio del invierno para evitar estas enfermedades con prevenciones auxiliares ."

Bronquitis: Es una inflamación de los tejidos que recubren a los bronquios, que provocan síntomas como tos, mucosidades (incluso en la tos) de color blanco, amarillento o verdoso, escalofríos, dolor de cabeza, fiebre leve, dificultad o molestia para respirar, ronquera, sensación de opresión en el pecho y silbidos al respirar.

Bronquiolitis: Es un virus que ataca las vías respiratorias, que puede desprenderse de condiciones como la gripe, influenzas o parainfluenzas y adenovirus. Los síntomas de esta enfermedad de invierno son silbidos en la respiración, fatiga corporal, secreciones nasales y una ligera tos.