Cómo disimular las varices

Esas várices que tanto afean nuestra apariencia pueden eliminarse, pero es bastante trabajoso. Si prefieres una solución más rápida, mejor aplica estos trucos simples para disimularlas.

Cómo disimular las varices

Técnicas para ocultar las várices

¿Tienes várices y "arañitas" en tus piernas y quieres disimularlas? Pues aquí te contamos algunos buenos trucos para esconderlas, sin necesidad de restringir tu vestuario al uso de pantalones largos y faldas hasta el piso. También veremos algunos remedios populares. Combinando ambas técnicas, podrás esconder la fea apariencia de las piernas mientras vas eliminándolas en cuestión de semanas.

"Las várices son venas dilatadas que no logran tener una correcta circulación sanguínea, expandiéndose y quedando a la vista por debajo de la piel."

¿Qué son las várices?

Definimos como "várices" a las venas dilatadas que no logran tener una correcta circulación sanguínea de regreso hacia el corazón. Esto produce una expansión del cuerpo venoso, que hace que quede a la vista por debajo de la piel, y provocando una apariencia bastante desagradable. Comúnmente se producen en las extremidades, particularmente en las inferiores, como glúteos y piernas, y hasta en los pies.

En algunas ocasiones, esta dilatación y estancamiento de la sangre puede producir inflamaciones y dolor, por lo que se recomienda tratarlas para su eliminación en lugar de sólo ocultar su apariencia. En este enlace encontrarás muchos artículos para su tratamiento.

Maquillaje para disimular las várices

El mejor truco para disimular la apariencia de las várices y arañitas venosas es el maquillaje. Pero no se trata de cualquier maquillaje, sino de una base cremosa translúcida, matizadora de los tonos de la piel. Como estas marcas suelen tener una apariencia azulada, puedes taparlas con un lápiz corrector para ojeras de tono amarillo, o bien verde si tus várices son de tonos rojizos. Luego, aplica una base del mismo o de un tono más claro que tu piel, y esparce bien para dar a tus piernas una apariencia más natural.

Otra opción es utilizar algo de autobronceante, ya que la piel asoleada ayuda a disimular las imperfecciones, tales como marcas, cicatrices, y también várices. A diario aplica crema humectante con autobronceante, ayudándote del lápiz corrector para ocultar las várices.

Remedios caseros para tratar las várices

No sólo debes esconder tus várices, sino que puedes darles solución con remedios caseros, fuera del consultorio médico. Lo primero es llevar una alimentación saludable cargada de vitaminas y minerales. Muchas frutas frescas y verduras sin cocción te ayudarán a mantener la piel y el sistema circulatorio hidratado y en buenas condiciones.

Eleva las piernas al dormir o al ver la TV, para mejorar tu irrigación sanguínea. Si por trabajo o por tus actividades debes permanecer largos ratos sentada, mueve las piernas cada tanto o da unos pasos cada media hora, para prevenir el estancamiento de la sangre. Si puedes, usa pantimedias algo ajustadas, para comprimir un poco las piernas y, con ello, las venas. No deben ser demasiado ajustadas (ni utilizar ropa ajustada por demás), pues esto previene la circulación sanguínea y te deja propensa a otras condiciones, además de las várices, como celulitis y problemas circulatorios.

Al tomar la ducha diaria, finaliza con masajes circulares y agua fría en tus piernas: los masajes y el frío ayudan a tener una mejor circulación sanguínea, y previenen el bloqueo de los sistemas circulatorios. Ayúdate con remedios y homeopatías naturales: dos cucharadas por día de extracto de castaño de Indias diluidas en un vaso de agua fresca.

"Al tomar la ducha diaria, finaliza con masajes circulares y agua fría en tus piernas: los masajes y el frío ayudan a prevenir las várices."

Un ungüento casero muy popular es el realizado sofriendo un buen puñado de hojas de caléndula en 250 gramos de mantequilla. Cuando haya hervido y echo espuma, se retira del calor y se deja tapado en reposo por 12 horas. Pasado el tiempo, se vuelve a calentar para volver a líquido la mantequilla, y luego se filtra conservando sólo el líquido, que se aplica directamente sobre la piel afectada.