Recetas para hacer salsas de mostaza caseras

3 variantes para hacer salsas de mostaza y combinar con carnes, ensaladas y otros platos.

Recetas para hacer salsas de mostaza caseras

3 variantes para preparar salsa de mostaza

La salsa de mostaza es uno de los condimentos favoritos en todo el mundo. No podemos siquiera pensar en una hamburguesa, en un buen corte de cerdo o en un hot dog sin este condimento. Por eso, aquí aprenderemos a elaborar diversas salsas a base de mostaza, para que sirvas acompañando y complementando todos tus deliciosos platillos.

"La mostaza, con su picor, es un aliado ideal de la miel, dulce y natural."

Salsa de mostaza y miel con especias

La mostaza, con su picor, es un aliado ideal de la miel, dulce y natural. Prepara una salsa de mostaza y miel de manera más que sencilla, colocando en un pote dos partes de salsa de mostaza con una parte de miel natural orgánica, y removiendo bien. Esta salsa es ideal para acompañar cerdos y platillos agridulces.

Si quieres mejorar un poco esta preparación tan sencilla, haz una versión especiada mezclando dos partes de salsa de mostaza con una de miel, junto a dos cucharadas de vinagre de manzanas, una pizca de sal, una de pimienta blanca o negra recién molida, y un toque apenas de jengibre seco molido. También puedes agregar páprika o pimentón dulce.

Mantequilla de mostaza y manzanas

Esta es una salsa espesa y deliciosa, especial para acompañar carnes blancas, ensaladas y platillos con quesos.
Coloca en un bol media taza de mostaza en polvo (puedes triturar semillas de mostaza) junto con un 1/4 taza de mantequilla o puré de manzanas, tres cucharadas de vinagre de manzanas, y una pizca de sal. Mezcla bien con una espátula y lleva a la nevera para macerar por unas dos semanas y lograr el sabor ideal.

"Los pickles y la mostaza combinan a la perfección."

Salsa de mostaza y pickles

Los pickles y la mostaza combinan a la perfección. Para hacer esta receta de salsa de mostaza, coloca en una sartén de fondo grueso media taza de semillas de mostaza amarillas, y dale calor, agregando dos cucharadas de vinagre de manzanas y una pizca de sal. Apaga el fuego y deja las semillas en este remojo tibio hasta que enfríe por completo. Ya listo, agrega una cucharada de miel orgánica y una cucharada de la especia que prefieras, como estragón, pimientos picantes o chiles secos y triturados, jengibre, lemongrás, etc., removiendo para integrar y humectar en el vinagre y la miel.

Puedes usar estas semillas crocantes en ensaladas de hojas, como complemento de carnes rojas y blancas, o bien licuar para obtener una consistencia más pastosa y especial.