Propiedades de la salsa de tomate

La salsa de tomate está siempre presente en nuestras comidas. Contiene muchas propiedades, pero suele ser reemplazada por otras variedades como el ketchup y el tomate frito. ¿Es bueno el reemplazo?

Propiedades de la salsa de tomate

Salsa de tomate casera, la de más propiedades

Típica de la dieta mediterránea, la salsa de tomate es ampliamente consumida en todo el mundo ya que es un excelente acompañante para platos de arroz y varios guisos tradicionales. ¿Qué propiedades esconde esta sabrosa salsa hecha a base de tomate?

La mejor forma de disfrutar de esta exquisita salsa es prepararla de forma casera y natural. Para ello basta con contar con un kilo de tomates maduros, un poco de aceite de oliva, sal y cebolla o ajo (opcional), cortar bien los tomates y la cebolla y freír en la sartén. Se puede añadir una pizca de azúcar para contrarrestar la acidez del tomate.

De esta forma nos aseguramos que la salsa no contiene aditivo alguno, a la vez que nos beneficiamos de las sales minerales y la vitamina B y C que contiene el tomate en gran cantidad. Su poder antioxidante (perfecto para prevenir varios cánceres) y las pocas calorías de esta salsa (apenas unas 15 o 20 por cada 100 gramos) son otras dos características que la hacen ideal para tomar sin restricciones y a cualquier hora del día.

"La mejor forma de disfrutar de esta exquisita salsa es prepararla de forma casera y natural."

Propiedades del tomate frito precocido

A diferencia de la salsa natural, el tomate frito envasado pierde buena parte de sus propiedades al verse sometido al proceso de manipulación industrial, y aunque todas las marcas lo vendan como "tomate natural y nutritivo", lo cierto es que muchas de las propiedades del tomate, como la vitamina C o los minerales, se pierden en buena parte durante el proceso de fabricación.

Además, este precocinado contiene más calorías que su homólogo casero (unas 75 u 80 por 100 gramos) y un mayor aporte en sal, desaconsejado para personas que no deben tomar demasiado sodio.

"La salsa de tomate casera será siempre la mejor opción a la hora de acompañar un plato en la mesa."

Propiedades del ketchup

  • El ketchup es el acompañamiento preferido de cualquier niño pequeño, pero, ¿es tan nutritivo como la salsa de tomate natural? Este tipo de preparado industrial cuenta con un contenido más alto en vinagre y azúcar (de ahí su sabor dulce), y además, más calorías (30 por 100 g).
  • No es un alimento que se deba prohibir (raramente se consume en gran cantidad) , pero siempre se debe optar por la salsa de tomate natural en caso de ser posible.
  • Cabe destacar que el ketchup tradicional tiene un contenido bastante elevado en sal (entre el 3 y el 5 por ciento), y por tanto, se encuentra contraindicado en personas que sufren de tensión alta o diabetes, entre otros trastornos cardiovasculares.
  • Resumiendo, la salsa de tomate casera será siempre la mejor opción a la hora de acompañar un plato en la mesa, por sus capacidades nutritivas y antioxidantes, mientras que el ketchup y el tomate frito se deberían tomar de forma más esporádica y controlada, especialmente si se sufren de los trastornos ya mencionados.