Cómo hacer porcelana fría

Una de las masas para modelar más útiles y sencillas de manejar, es la porcelana fría. Y aunque es económica, podemos hacerla nosotros mismos.

Cómo hacer porcelana fría

La porcelana fría es, de entre las masas para modelar, una de las más elegidas. Debido a su practicidad, a la facilidad de su moldeo, y a la conveniencia de su secado sin cocción, la porcelana fría es la reina de entre las pastas para artesanías, manualidades, y para la creación de todo tipo de elementos decorativos, y también de uso funcional.

Aunque su costo es relativamente económico, podemos crear nuestra propia porcelana fría en casa. Guarda esta receta para cuando te encuentres ante la necesidad de tener masa para modelar a mano, o para cuando desees optimizar tus gastos en algún evento u ocasión.

Para realizar porcelana fría casera utilizaremos pocos ingredientes. Requeriremos de dos tazas de cola adhesiva blanca (la de carpintero o la que usan los niños en la escuela), y la misma cantidad de fécula de maíz. También necesitaremos glicerina (dos a tres cucharadas), vaselina (igual cantidad), aceite para bebés (también tres cucharadas, o menos) y una cucharadita de algún conservante, para que la masa dure por más tiempo. Te recomendamos nipajin.

En cuanto a los elementos necesarios para hacer porcelana fría, vamos a usar una olla o sartén con cobertura antiadherente, de preferencia teflón. También necesitaremos una espátula o cuchara plástica o de madera, para no dañar la sartén o el cazo u olla, y una bolsa plástica para guardar allí la masa ya lista.

Comenzamos a hacer la porcelana fría colocando en la olla la cola y la fécula de maíz. Luego de incorporar, agregamos la vaselina, la glicerina, el conservante y el aceite para bebés. Si notas que la masa está demasiado sólida, agrega cola o glicerina. Si la notas muy blanda, agrega fécula. Mezcla para incorporar, y lleva a fuego bajo a moderado.

Ve removiendo la masa durante la cocción, evitando que se pegue y queme en el fondo y en los laterales. Cuando la masa se despegue adecuadamente de los bordes y del fondo de la olla, la masa estará lista para salir del calor.

Coloca sobre la mesada y comienza a amasar con las manos. Para evitar que la mesada enfríe demasiado rápido la masa, puedes colocarla en una plancha de silicón o de goma eva para amasar con más comodidad.

Cuando hayas amasado hasta que la masa esté fría, llévala a una bolsa plástica y deja reposar por 12 a 24 horas, aunque la masa puede ser trabajada inmediatamente.

Listo, ya tendrás porcelana fría lista para usarse.