Cómo hacer azúcar de colores

Otorgar algo de color y diversión a nuestras reposterías será muy sencillo si utilizamos azúcar de diferentes colores.

Cómo hacer azúcar de colores

Azúcar de colores

Con azúcar de colores podemos decorar masitas, bombones, tartas, galletas y dar vida a un plato dulce con poco color. Es una solución fácil, rápida y económica.

Ingredientes

Para hacer azúcar de colores, sólo debemos contar con los siguientes ingredientes:

  • Azúcar
  • Colorante alimentario

Al colorante lo podemos adquirir en cualquier comercio. Debe ser líquido, ya que estos envases permiten servir gota a gota y es más fácil lograr un amplio espectro de colores.

"Con azúcar de colores podemos decorar masitas, bombones, tartas, galletas y dar vida a un plato dulce con poco color."

Procedimiento

Para lograr colorear el azúcar debemos colocar la misma en un tarro de cristal (sin llenarlo). Luego, verter unas gotas del colorante, cerrar y sacudir con energía, hasta lograr el color deseado. Si la cantidad de azúcar es grande, puede que el color sea muy suave, para cambiar esto, solo hay que ir agregando más colorante.

Cuando tengamos el color de azúcar listo, desparramamos sobre una fuente, plato o bandeja, y dejamos que se seque totalmente. Si deseamos acelerar el proceso de secado, podemos colocar la fuente sobre el horno o calefactor.

Una vez que el azúcar coloreada esté bien seca, se vuelve a guardar en el frasco hasta el momento de usarla, pero no debe pasar mucho tiempo.

"El azúcar de colores también es muy útil a la hora de preparar huevos de pascua."

El azúcar de colores también es muy útil a la hora de preparar huevos de pascua, para aquellas personas y niños que no pueden consumir chocolate, generalmente por ser alérgicos a la lactosa. De esta manera, pueden disfrutar de unas dulces pascuas igual que todos los demás.

No es recomendable almacenar azúcar coloreada. Además, al ser tan sencilla su preparación, no hace falta colorear gran cantidad.

Nota: Al mezclar el colorante en el frasco, se recomienda no llenarlo hasta más de la mitad, para permitir que el azúcar se mezcle de manera homogénea al agitarlo.