Cómo cuidar a un perro o gato en su vejez

Los años han ido pasando y nuestro perro o gato fue creciendo, ya no es el mismo que en su juventud. Debemos saber cómo cuidar a una mascota en esta etapa de su vida.

Cómo cuidar a un perro o gato en su vejez

Ha llegado el tiempo en que nuestras mascotas necesitan un cuidado diferente y especial; se acercan a su etapa de vejez y para saber cuando es ese momento, hay que estar atentos a ciertos aspectos generales. Ahora es el turno de devolverle todo el cariño que nos dio durante tantos años, de mimarlos y consentirlos.

De más esta decir que, anteriormente, nuestro querido perro o gato era un animal inquieto, lleno de vitalidad, y en los últimos tiempos se encuentra muy sedentario, donde hay días que solo se levanta para comer o tomar agua, y se echa al sol durante horas enteras, o en el lugar donde suele dormir. Por ello hay que acondicionarle su lugar de descanso, dándole un piso más acolchado, para prevenir callos y úlceras.

De todos modos, nuestro perro o gato necesita de un buen ejercicio para mantener en mejor estado posible todo su organismo. Una buena idea es realizar caminatas todos los días, que no sean muy largas ni tampoco rápidas. Recordemos que por su vejez, pueden comenzar a tener problemas en la vista y oídos, por lo tanto es posible que no vean ciertos obstáculos o no respondan cuando los llamamos, habrá que tener mucho cuidado en estos paseos para que nuestra mascota no se pierda o lastime.

A medida que avanza la vejez de los perros y gatos, sus músculos se tornan menos capaces de responder a sus ordenes, por lo que es aconsejable que la mascota salga afuera más veces al día, esto es para aquellos animales que se encuentran dentro del hogar y salen a hacer sus necesidades.

En su vejez, los perros y gatos ya no se mueven tanto como antes y no realiza mucho ejercicio, es fundamental entonces, controlar su peso. Un nivel excesivo puede ser demasiado peligroso para sus huesos, y molesto para el animal. En algunos casos se aconseja consultar con el veterinario para saber si podemos seguir dándoles el mismo alimento que consumía antes, quizás sea mejor cambiarlo por otro que pueda aportarle todo lo que necesita.

También debemos tener en cuenta que necesitará visitas mas periódicas al veterinario para controlar su vista, su peso, su audición u otras posibles insuficiencias.

Hagamos de cuenta que nuestro animal es un anciano, con todo lo que esto implica, debemos extremar sus cuidados y estar atentos a cualquier anomalía que pudiera surgir. Lo más importante es disfrutar al máximo de los últimos años de compañía que nuestro perro o gato nos puede ofrecer.