Cómo elegir una silla para la oficina en invierno

En épocas invernales nos movemos menos y vamos mas abrigados a trabajar, por lo que si estás por buscar una silla para la oficina sera mejor tener en cuenta los siguientes aspectos.

Cómo elegir una silla para la oficina en invierno

¿Porque una silla especial para el invierno?

Para quienes trabajan frente a una computadora o en un escritorio durante prolongados períodos, la elección de una buena silla es fundamental. Además de los criterios a tener en cuenta, en la época fría debemos prestar especial atención al asiento que utilizamos, ya que éste debe darnos el apoyo suficiente, la comodidad más adecuada, y debe ser un verdadero aliado en esta época otoñal e invernal en la que realizamos menos actividad física y nos movemos menos.

Quizás parezca una exageración, pero es tan simple como eso: durante el otoño y el invierno ejercitamos menos, nos movemos menos, y hasta procuramos andar menos por la calle. También comemos alimentos más ricos en calorías y carbohidratos, y hasta nuestro metabolismo se modifica para efectivizar la quema de energías en el cuerpo. Por eso, es una buena idea elegir la silla de trabajo que mejor nos sirva durante esta época, siguiendo algunos de estos consejos.

"Una silla apropiada nos ayudará a pasar mejor el invierno en nuestro trabajo."

Como elegir nuestra silla óptima para el frío

Como primera medida, debemos elegir una silla ergonómica. Debe resultar cómoda, lo suficientemente acolchada, y debe proveer buen apoyo a nuestras lumbares y a nuestra espalda en general, según cuente o no con apoyabrazos y respaldo para la cabeza. Una buena idea es elegir una que tenga alturas y posiciones regulables, para que nos permita momentos de relajación y de eficacia en la postura a la hora de trabajar.

El asiento en sí debe estar levemente inclinado hacia abajo, para que el borde no presione en reverso de las rodillas, obstaculizando la circulación sanguínea y permitiendo un buen apoyo de los pies en el piso. Otra buena idea es elegir una silla con ruedas que permita un desplazamiento por la oficina, aunque esto finalmente dependerá de cada usuario.

Con respecto al tapizado y al material de fabricación, mientras que en el verano elegimos telas livianas, naturales, con una adecuada ventilación para que nos resulten más frescas, en el otoño y el invierno no elegiremos lo opuesto, pero sí algo diferente. La silla siempre debe tener un sistema de ventilación, para evitar que la transpiración y la humedad del cuerpo terminen por marcar arrugas en la ropa. Sin embargo, en la época fría puede tratarse de un género o material algo más pesado, que no resulte frío al tacto para proveer mayor comodidad a cada usuario.

Las telas de confección plásticas son cálidas, pero debemos elegir una perforada que permita una adecuada ventilación para evitar una transpiración excesiva.