Cómo ser un mejor líder

Algunos consejos que te ayudarán a ser un mejor líder en tu trabajo o en la familia.

Cómo ser un mejor líder

Consejos para ser un buen líder

En la naturaleza es común ver que el líder de la manada es el más grande, el más fuerte, incluso el que ha ganado su título tras una feroz batalla. Pero, si bien somos también animales, entre los seres humanos el líder toma otra forma, siguiendo uno de dos caminos: ser un líder autoritario y casi autárquico, o ser un buen líder. Si eliges la segunda opción, no te pierdas los consejos que te daremos en esta nota.

"El buen líder es aquél que comprende las necesidades colectivas para amoldarlas a una idea general, en busca del bien común."

¿Qué es un buen líder?

El buen líder es aquél que comprende las necesidades colectivas para amoldarlas a una idea general, en busca del bien común. Pero esta definición queda algo vana cuando la trasladamos a la realidad. Bien podemos ir desglosando lo que hace al buen líder, para que puedas trabajar sobre tus capacidades y convertirte, en poco tiempo, en un gran líder del trabajo, de la familia, de un grupo de pares o de un equipo deportivo, y muchos escenarios más.

Las definiciones de "buen líder" incluyen diversos aspectos de la personalidad y de la conducta de quien esté al mando. Por un lado, debe tener en cuenta la meta general y la meta particular, y propiciar un entorno en el que todos los integrantes puedan trabajar o funcionar a gusto, sin represiones ni opresiones, para poder dar la mayor productividad en sus labores.

El buen líder reconoce la actividad de sus empleados o subalternos. Sabe cuáles son sus capacidades y limitaciones, y procura animar a las personas a dar lo mejor de sí, y no a la inversa. Así, presiona suavemente para motivar al equipo, sin exigir más de lo que se puede pero sin dejar que el esfuerzo general baje.

Cómo ser un mejor líder

Si estás en una posición de poder, recuerda que alguna vez comenzaste desde abajo. Recuerda cómo pensabas de tu propio líder, para reconocer sus errores y aciertos y poder trabajar en tus propias virtudes y defectos. Por ejemplo, de chico observabas a tu padre o a tu madre como líderes del hogar, notando sus acciones y aprendiendo de ellas. Hoy que tienes tu propia familia estás en la posición de líder, y puedes aplicar lo aprendido, reconociendo de antemano sus errores pasados y las soluciones que los corrigieron, para evitar cometerlos tú. También puedes innovar en acciones, creando tus propios patrones, para ir dejando una buena enseñanza en tus hijos.

Para ser buen líder hay que tener la mano firme al momento de tomar decisiones, y la mente fría a la hora de considerar las opciones. El buen líder sabe escuchar a todos los integrantes, sin minimizar por cargos u oficios, para tomar las ideas que sean de provecho. Luego, conociendo todas las alternativas, tomará una decisión en pro del bien común.

"Para ser buen líder hay que tener la mano firme al momento de tomar decisiones, y la mente fría a la hora de considerar las opciones."

Debes escuchar, prestar atención, y anticiparte a los eventos futuros. El buen líder, también, tiene corazón, emociones, y reconoce la humanidad de los demás. Es flexible con los permisos, pero hace cumplir las obligaciones con tono firme y trato respetuoso. Nunca tiene ironía en sus palabras, ni denigra a los demás: es calmo, cauteloso y amable a todo momento. También, el buen líder da el ejemplo, desde su modo de hablar hasta su modo de vestir y caminar, en su conducta mesurada y en un trato amable con todos.

El buen líder, en definitiva, es una persona a la que los demás miran, queriendo poder llegar a ser como él o ella en algún momento de sus vidas. ¿No quisieras acaso ser ese buen ejemplo?