Cómo hacer que las puertas corredizas se muevan con facilidad

Te explicamos cómo limpiar las ruedas y el carril de las puertas corredizas para que se deslicen con facilidad.

Cómo hacer que las puertas corredizas se muevan con facilidad

Reparación de puertas corredizas

Las puertas corredizas funcionan muy bien porque permiten la entrada de luz y hacen más útiles los espacios. Sin embargo, con el tiempo comienzan a ponerse tan duras que tenemos que rodarlas a empujones. Esto se puede arreglar en sólo 15 minutos si prestas atención a los siguientes detalles.

Elementos necesarios
Las herramientas que tendrás que localizar serán:
  • 1 martillo
  • 1 destornillador
  • 1 bloque de madera
  • Aceite lubricante
  • 1 escoba
  • 1 nivel
  • 1 palanca para levantar la puerta

"Casi siempre el sistema de puertas corredizas se atasca debido a que el carril se llena de polvo y suciedad."

Cómo reparar una puerta corrediza

Casi siempre el sistema de puertas corredizas se atasca debido a que el carril se llena de polvo y suciedad, así que procede a limpiarlo. Si quieres que te quede bien limpio, tendrás que sacar las puertas, esto se hace empujando un poco hacia arriba para quitarlas del carril.

Seguidamente, añade unas gotas de aceite lubricante para que las puertas deslicen con facilidad. Se recomienda que apliques polvo de grafito (el del lápiz) para que el carril se conserve mejor.

Ahora, procede a ver si el carril está derecho, sino es así, enderézalo dándole golpecitos con el bloque de madera y el martillo. También lo puedes hacer con una piedra, pero tienes que tener delicadeza para no abollarlo.

Fíjate en los tornillos que hay en la parte inferior de la puerta, estos sirven para ajustar las ruedas de la misma. Si no funcionan correctamente, ajústalas usando el destornillador.

Si la puerta corrediza está atascada por completo, tendrás que comprar unas ruedas nuevas y reemplazar las anteriores. Esto se hace aflojando por completos lo tornillos de los que hablamos anteriormente. Cuando coloques los nuevos, ajusta los tornillos hasta que las ruedas penetren lo más que se pueda.

En caso de que notes que los tornillos no están funcionando adecuadamente, vale la pena sacarlos e ir a la ferretería por unos nuevos que tengan el mismo diámetro. Recuerda llevarlos para asegurarte de encontrar el tamaño y justo.