Cómo reconocer a un gato persa

Te contamos cuáles son las características del gato persa para distinguirlo del resto de las razas, además de algunos consejos sobre su cuidado.

Cómo reconocer a un gato persa

Características del gato persa

Normalmente, solemos pensar que cualquier gato que tiene el pelo largo es persa y no hay nada más falso que esto. Existen muchas razas de gatos con pelo largo, así que si deseas adquirir un felino y te gustaría que fuera de esta raza, te recomendamos que prestes mucha atención a los detalles que te ayudarán a reconocerlo.

Pelaje del gato persa. Los gatos persas en un inicio eran sólo blancos, pero en la actualidad están registrados más de 50 tonalidades. Tienen la cara redonda y la nariz aplastada perfectamente alineada con el mentón. Su pelo es sedoso y liso, puede llegar a medir hasta 20 centímetros en especímenes adultos.

Ojos. Sus ojos son redondeados y varían según la tonalidad del pelaje; los hay rojos, azules, dorados, cobrizos y hasta existen algunos que tienen una tonalidad distinta en cada ojo.

Orejas. Revisa sus orejas, ubicadas sobre el cráneo y bien separadas la una de la otra, deben ser redondeadas por fuera y en su interior. Una vez comprobada esta característica, fíjate que las patas sean fuertes y cortas, sus pies largos y redondos, y en especial debería tener mechones entre los dedos.

El cuerpo de un gato persa. Estos gatos de aspecto rechoncho, tienen una diminuta nariz situada justo a nivel de los ojos. Son totalmente chatos, así que si algún estafador trata de venderle a un gatito con alguna característica distinta, definitivamente no es persa, ya que estos son gatos de línea genética muy pura.

Los criadores cuidan minuciosamente los cruces de esta raza porque tienen pocos cachorros en cada camada y son muy delicados, esa es una de las razones de su alto precio.

"Antes de adquirir un gato persa, debes saber que su cuidado suele ser costoso en tiempo y dinero."

"Los gatos persas en un inicio eran sólo blancos, pero en la actualidad están registrados más de 50 tonalidades."

Cómo cuidar un gato persa

Antes de adquirir un gato persa, debes saber que su cuidado suele ser costoso en tiempo y dinero. Debes cepillarlos a diario para evitarle problemas estomacales y limpiarlos después de hacer sus necesidades.
Suelen tener una salud delicada debido a su poca mezcla genética, así que visitarás con frecuencia al veterinario.

A pesar de estas desventajas, estos felinos suelen ser una compañía muy tranquila, les encanta que les hagan cariño, no necesitan salir de la casa para sentirse bien y suelen respetar sin problema los sitios prohibidos, lo que los transforma en una excelente compañía casera.