Cómo elegir la carne para las milanesas

Las milanesas son uno de los platos preferidos por todos, al igual que las papas fritas, su inseparable compañera o el huevo frito. Por eso, elegir la carne adecuada para prepararlas es algo fundamental para que este plato sea exquisito.

Cómo elegir la carne para las milanesas

Carne para milanesas

Las milanesas son uno de los platos preferidos por todos, sin distinción de sexo ni edades, al igual que las papas fritas, su inseparable compañera o el huevo frito. Por eso, elegir la carne adecuada para prepararlas es algo fundamental para que este plato sea exquisito.

"Las milanesas son uno de los platos preferidos por todos, sin distinción de sexo ni edades."

Consejos para preparar milanesas

Las mejores opciones en carne son un trozo de nalga, cuadrada, bola de lomo, peceto cuadril o lomo.

Antes de comenzar a preparar las milanesas, es conveniente que la carne esté bien fría, esto permitirá que el cuchillo se deslice con facilidad y pueda cortar los bifes del ancho que desee.

Si tiene una cortadora de fiambre, puede pasar el trozo de carne por la cuchilla, graduando el ancho de la misma, y resultará mucho más sencillo que la tarea anterior. Si tiene un carnicero de confianza y paciencia, pídale que le corte con el grosor deseado para lograr milanesas finitas y parejas.

Es conveniente golpear un poco todas las carnes para elaborar milanesas (con firmeza pero sin romperla) con el martillo para carnes. Esto provoca que los tejidos se abran un poco y se cocine más rápidamente y de forma pareja. Además, ayuda a disimular la presencia de nervios.

Si no está seguro que la carne que ha comprado es tierna, le recomendamos rociarla con unas gotas de vinagre.

A partir de este momento, solo queda rebozarlas a gusto y cocinarlas, ya sea fritas o al horno.

Si la carne fuera demasiado jugosa, lo mejor es pasarlas por harina (directamente) antes de aplicarle el rebozado elegido.