Cómo Trabajar Inteligentemente

Trabajar de manera inteligente no quiere decir pasarse horas y horas terminando tareas, sino usar el tiempo de forma eficaz, produciendo más en menos. Aquí tienes algunos consejos para lograrlo.

Consejos para trabajar inteligentemente. Claves para trabajar de forma inteligente. Cómo trabajar de manera inteligente y eficiente

Trabajar inteligentemente implica reconocer los momentos en que estamos más activos y aquellos en los que solemos divagar.

Consejos para Trabajar Inteligentemente

La regla principal para trabajar inteligentemente es esforzarse más por las tareas prioritarias, con el fin de lograr tus metas. Esto se puede cumplir tanto si tienes un empleo en relación de dependencia o si eres autónomo.

Si estás sintiendo que trabajas todo el día pero que eso no se ve reflejado en tus ingresos o en la reducción de tu lista de pendientes, entonces, debes empezar a hacer las cosas de una manera diferente. La vida no tiene que estar compuesta por 12 horas de trabajo al día. Existen formas muy simples de ser más eficiente en lo que haces, lo que trae como resultado más tiempo libre para descansar o hacer lo que más te guste.

El trabajo inteligente es el que llevan a cabo los grandes empresarios de todo el mundo. Ellos han sabido sacar provecho a cada segundo que pasan en sus oficinas. Se han dado cuenta que vale la pena poner lo mejor de si mismos durante seis horas, por ejemplo, terminar las tareas o compromisos, y después, aprovechar para disfrutar del deporte, la vida al aire libre, la familia, etc.

"La regla principal para trabajar inteligentemente es esforzarse más por las tareas prioritarias, con el fin de lograr tus metas."

Claves para trabajar de manera inteligente

Si deseas trabajar inteligentemente, no dudes en echar un vistazo a estos consejos:

Claves para ser eficiente y trabajar inteligentemente. 5 consejos para trabajar de forma inteligente. Métodos para trabajar inteligentemente

Para trabajar de manera inteligente debes entrar en contacto con la naturaleza. ¡Verás como tu mente se reactiva en segundos!

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Respeta tu capacidad para prestar atención

Debemos ser conscientes de los momentos en que estamos más compenetrados con las tareas y aquellos donde las distracciones forman parte de la jornada. Si es necesario, descansa, no deben asustarte los “break”, siempre y cuando sean beneficiosos. Esto quiere decir que si sientes que tu cerebro no da para más, cinco minutos de cerrar los ojos o salir a tomar aire fresco no vienen mal.

Conserva y mantén tu mejor activo: tú mismo. Equilibra lo físico, lo emocional, lo mental y lo espiritual. Nuestro cerebro es capaz de prestar atención durante 90 minutos seguidos y luego necesita un descanso de 20 minutos. Establece un cronograma con las horas de trabajo y las horas de descanso, verás cómo cambia tu productividad.

Si tienes mucho que hacer, de vez en cuando darse un respiro no viene mal; lo mismo que ocurre con las series en el gimnasio, entre cada una de ellas, hay que descansar.

Trabajar inteligentemente: toma siestas de 30 minutos

Cada vez son más las empresas que ofrecen una habitación a sus empleados para que puedan dormir un rato cuando crean necesario. Esto se debe a que se ha confirmado que la mente precisa descansar y “desenchufarse” un poco para mejorar su función cognitiva, además de beneficiar el proceso de aprendizaje y ayudar a retener más la información.

La siesta permite guardar datos en otra zona de almacenamiento más permanente. Eso no quiere decir que duermas tres horas seguidas, porque conseguirás el efecto contrario; con 20 o 30 minutos diarios es suficiente para recargar las baterías.

Pasa más tiempo rodeado de naturaleza

Este es otro de los consejos para trabajar inteligentemente que no muchos cumplen. Ir a un parque a la hora del almuerzo, o si tienes un empleo freelance, optar por llevar el portátil al patio. Lo natural nos ayuda a relajar la mente y a descansar la atención. Estos ambientes tienen menos estímulos que las ciudades, por ende, el cerebro está más tranquilo: Podrás mejorar tu actitud en el trabajo, sentirte motivado y con todas las energías para afrontar cualquier reto.

Trabaja por bloques

La idea es bastante interesante, porque indica que debemos cambiar de lugar donde hacemos nuestras tareas, en cuánto sea posible. En una oficina podemos mover el escritorio, por ejemplo, o mudarnos de piso o área. En el caso de los autónomos, elegir diferentes ambientes de la casa, cafés, etc.

Cada sitio puede significar una tarea diferente, como por ejemplo, responder correos de clientes en uno, armar pedidos en otros, hacer la contabilidad en un tercero, etc. Y una buena idea es, si tienes una tarea que mucho no te agrada, elige el lugar más bonito para hacerla, así no sentirás tanto tedio. Puedes moverte de locación todas las veces que quieras en un mismo día o semana, según las actividades que realices.

Revisa el correo apenas llegues al trabajo

Cuando comienza tu jornada laboral es el mejor momento para chequear los e-mails. Es bastante útil porque te ayuda a plantear un panorama general de las cosas que deberás hacer a lo largo del día, y luego, durante las horas de trabajo, establece momentos para leer y responder.

"Para trabajar inteligentemente, establece un cronograma con las horas de trabajo y las horas de descanso; verás que cambia tu productividad y serás más eficiente."

Si cada vez que te llega un correo vas a dejar de hacer lo que estás haciendo para contestar, entonces estarás perdiendo bastante tiempo (o no lo estarás aprovechando correctamente). Coloca etiquetas para encargarte de lo urgente primero y deja para el final lo que puede llegar a esperar. Evita las notificaciones que te llegan al móvil, porque también te distraerán.

¿Quieres empezar a trabajar de manera inteligente? Entonces, pon en práctica estos consejos, los resultados serán inmediatos. Si crees que necesitas más tiempo para cumplir con todos, puedes ir añadiendo de a uno a tus hábitos cotidianos.